La administración Trump ha prohibido a cinco figuras europeas la entrada a EE. UU., acusándolas de presionar a las empresas tecnológicas estadounidenses para que censuren los discursos en línea. Los individuos, incluido el ex comisario de la UE Thierry Breton, están vinculados a la Ley de Servicios Digitales de Europa y a los esfuerzos contra la desinformación. El movimiento ha desencadenado una reacción diplomática, con líderes europeos condenando las sanciones como intimidación.

Según fuentes, los cinco individuos - Thierry Breton, Imran Ahmed, Josephine Ballon, Anna-Lena von Hodenberg y Clare Melford - fueron prohibidos bajo una política de mayo que apunta a nacionales extranjeros considerados responsables de suprimir el discurso protegido por la ley estadounidense. El secretario de Estado Marco Rubio publicó en X, afirmando que "durante demasiado tiempo, ideólogos en Europa han liderado esfuerzos organizados para coaccionar a las plataformas estadounidenses para castigar los puntos de vista estadounidenses que se oponen". La administración Trump ya no tolerará estos "actos de extorsión flagrantes", agregó Rubio.

La política, que se introdujo en mayo, apunta a prevenir que nacionales extranjeros presionen a las empresas tecnológicas estadounidenses para que censuren o supriman el discurso en línea. El movimiento se ve como una respuesta a las crecientes preocupaciones sobre la difusión de información errónea y desinformación en las plataformas de redes sociales. La Ley de Servicios Digitales, que actualmente se está implementando en Europa, apunta a regular el contenido en línea y a hacer que las empresas tecnológicas sean responsables de la difusión de contenido dañino o ilegal.

Los líderes europeos han condenado las sanciones como un intento de intimidar y silenciar a los críticos de las políticas de la administración Trump. "Esto es un intento claro de sofocar la libertad de expresión y debilitar los esfuerzos para regular el contenido en línea", dijo un portavoz de la Unión Europea. "No nos dejaremos intimidar por estas sanciones y seguiremos presionando para una mayor regulación del contenido en línea".

El movimiento tiene implicaciones significativas para la industria tecnológica, con muchas empresas enfrentando una creciente presión para regular el contenido en línea. La Ley de Servicios Digitales, que actualmente se está implementando en Europa, apunta a hacer que las empresas tecnológicas sean responsables de la difusión de contenido dañino o ilegal. La ley requiere que las empresas implementen medidas para prevenir la difusión de información errónea y desinformación, y para proporcionar una mayor transparencia en sus prácticas de moderación de contenido.

El estado actual de la situación es que los cinco individuos están prohibidos de entrar en EE. UU. y están enfrentando una reacción diplomática de los líderes europeos. La administración Trump no ha comentado más sobre el asunto, pero se espera que la situación siga desarrollándose en las próximas semanas y meses. Las implicaciones del movimiento para la industria tecnológica y la regulación del contenido en línea siguen siendo inciertas, pero está claro que la situación tiene implicaciones significativas para el futuro del discurso en línea y la regulación.