Empresas registradas en el Reino Unido han sido vinculadas a la contratación de mercenarios colombianos en Sudán, según una investigación de The Guardian. Las empresas, establecidas por individuos sancionados por EE. UU., contrataron a los combatientes para las Fuerzas de Apoyo Rápido, una milicia ampliamente sospechosa de cometer crímenes de guerra en Sudán.

La investigación encontró que Zeuz Global, una empresa registrada en el Reino Unido, había utilizado los códigos postales del hotel Waldorf Hilton y el hotel One Aldwych en el centro de Londres, a pesar de haberse registrado inicialmente en un bloque de apartamentos en el norte de Londres. Cuando se les contactó, ambos hoteles negaron cualquier conocimiento de las actividades de la empresa. El gobierno del Reino Unido confirmó que el apartamento en cuestión estaba vinculado a la empresa.

"Es impactante que las empresas registradas en el Reino Unido estén involucradas en la contratación de mercenarios para una milicia sospechosa de crímenes de guerra", dijo un portavoz de Human Rights Watch. "Esto destaca la necesidad de una mayor supervisión de las empresas que operan en zonas de conflicto y la importancia de hacerlas responsables de sus acciones".

Las Fuerzas de Apoyo Rápido, lideradas por Mohamed Hamdan Dagalo, han sido acusadas de numerosas violaciones de derechos humanos, incluido el uso de soldados niños y el desplazamiento forzado de civiles. La milicia también ha sido vinculada a la represión del gobierno sudanés contra los grupos de oposición.

La contratación de mercenarios colombianos por Zeuz Global y otras empresas registradas en el Reino Unido plantea preguntas sobre el papel de las empresas militares privadas en zonas de conflicto. "El uso de mercenarios puede exacerbar la situación y crear más inestabilidad", dijo un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja. "Es esencial que los gobiernos y las empresas asuman la responsabilidad de sus acciones y aseguren de que no estén contribuyendo al sufrimiento humano".

La investigación también destaca los desafíos de regular las empresas militares privadas, que a menudo operan en áreas grises. "La falta de transparencia y rendición de cuentas en la industria militar privada es una gran preocupación", dijo un portavoz de la Campaña Contra el Comercio de Armas del Reino Unido. "Es esencial que los gobiernos tomen medidas para regular esta industria y prevenir que las empresas operen con impunidad".

El estado actual de Zeuz Global y las otras empresas registradas en el Reino Unido involucradas en la contratación de mercenarios colombianos es incierto. El gobierno del Reino Unido ha anunciado planes para revisar sus regulaciones sobre empresas militares privadas, pero queda por ver si esto llevará a algún cambio en la industria.

Mientras tanto, los grupos de derechos humanos y las organizaciones de defensa están pidiendo una mayor supervisión de las empresas que operan en zonas de conflicto y que los gobiernos tomen medidas para prevenir el uso de mercenarios en abusos de derechos humanos.