La Cámara de Comercio en una ciudad clave de un estado indeciso ha reconocido que la economía local no es tan robusta como la describió el ex presidente Donald Trump, con residentes que expresan una profunda decepción y frustración por los crecientes costos y los gastos de vida inasequibles.

Según los residentes, los precios de los bienes y servicios esenciales han aumentado significativamente, lo que hace que sea un desafío para las personas poder costear las necesidades básicas como la comida, el alquiler y los servicios públicos. Idalia Bisbal, una jubilada de 67 años que depende de la Seguridad Social, expresó sus preocupaciones, diciendo: "Es peor que nunca. Los precios son altos. Todo está subiendo. No puedes costear la comida porque no puedes costear el alquiler. Los servicios públicos son demasiado caros. La gasolina es demasiado cara. Todo es demasiado caro". Bisbal hablaba en el restaurante familiar Hamilton, un local que se ha convertido en un centro de debates comunitarios.

Las preocupaciones económicas en esta ciudad de Pensilvania no se limitan a los residentes individuales; también tienen un impacto significativo en las empresas locales. La Cámara de Comercio de la ciudad ha reconocido que la economía no es tan fuerte como se pensaba anteriormente, con algunos propietarios de empresas informando una disminución en las ventas y los ingresos. "Estamos viendo que muchas pequeñas empresas están luchando por mantenerse a flote debido a los altos costos de hacer negocios", dijo un portavoz de la Cámara de Comercio. "Los crecientes costos de la mano de obra, el alquiler y los servicios públicos están haciendo que sea difícil para las empresas mantener la rentabilidad".

La ansiedad económica en esta ciudad no es única en la comunidad local; es una preocupación a nivel nacional que ha sido exacerbada por la crisis de asequibilidad en curso. El tema se ha convertido en una vulnerabilidad para ambos partidos, con la administración Biden y la campaña Trump intentando abordar las preocupaciones de los votantes. El vicepresidente JD Vance reconoció la crisis de asequibilidad durante una visita reciente al área, culpando a la administración Biden e insistiendo en que mejores tiempos están por venir. La visita de Vance fue parte de un esfuerzo cada vez más urgente de la Casa Blanca para responder a la ansiedad económica que afecta a ambos partidos.

Las preocupaciones económicas en esta ciudad no se limitan a la comunidad local; también tienen un impacto significativo en la economía nacional. Los crecientes costos de vida y de hacer negocios están afectando el gasto de los consumidores, lo que a su vez está impactando el crecimiento económico en general. Según los datos de la Oficina de Estadísticas Laborales, el Índice de Precios al Consumidor (CPI) ha aumentado un 8,5% en el último año, con los precios de los bienes y servicios esenciales aumentando a un ritmo más rápido. El impacto en las empresas y residentes locales es evidente, con muchos luchando por llegar a fin de mes.

A medida que las preocupaciones económicas continúan creciendo, los residentes y propietarios de empresas de la ciudad están buscando soluciones para abordar la crisis de asequibilidad. La Cámara de Comercio está trabajando con funcionarios locales para desarrollar iniciativas que ayuden a las pequeñas empresas y a los residentes a hacer frente a los crecientes costos de vida y de hacer negocios. Mientras tanto, la Casa Blanca continúa sus esfuerzos para abordar la ansiedad económica, con la visita del vicepresidente Vance marcando el último de una serie de viajes de alto perfil al área. El resultado de estos esfuerzos queda por verse, pero una cosa es clara: las preocupaciones económicas en esta ciudad son un tema apremiante que requiere atención inmediata.